viernes, marzo 06, 2009

136. ¿UN NUEVO HOMBRE?


La autora Paula Sibilia (2005. El hombre postorgánico. FCE) presenta los caracteres del ser humano que lentamente se establece entre nosotros :

• El cuerpo humano, en su anticuada configuración biológica, se estaría volviendo obsoleto: intimidados seducidos por las presiones de un medio ambiente amalgamado con el artificio, los cuerpos contemporáneos no logran esquivar la tiranía del upgrade (actualización y nueva carga de programa). Un nuevo imperativo es interiorizado: el deseo de lograr una total compatibilidad con el tecnocosmos digital, mediante la actualización tecnológica permanente. Se trata de un proyecto sumamente ambicioso (…) que contempla la abolición de las distancias geográficas, de las enfermedades, del envejecimiento, e incluso, de la muerte. El ser humano, la naturaleza, la vida y la muerte atraviesan turbulencias despertando todo tipo de discusiones y perplejidades. Estamos ingresando en la era post-humana o en la post-evolución. (11-12)
• Si antes era necesario disponer de algún documento para probar la identidad (DNI) y hoy las tarjetas con sus bandas magnéticas o sus códigos permiten identificarnos como sujetos, como ciudadanos y como consumidores, en el futuro inmediato bastará un pequeño chip incrustado bajo la piel para identificar quienes somos. (35-36). La sociedad mantendrá el control aunque pareciera que ya no nos vigila. A la sociedad y a los dueños del poder ya no les interesa vigilar al productor disciplinado, sino controlar y monitorear al consumidor.
• Nuevas formas de trabajo (teletrabajo o trabajo desde la casa o la oficina en el hogar) tienden a desdibujar la barrera entre el ocio y el trabajo, entre el esfuerzo y el placer. Nuevas formas de corporalidad, nuevas formas laborales, nueva organización de la existencia. El teletrabajo no es mas que un collar o una pulsera electrónica, porque bajo la apariencia de libertad (hago lo que quiero, tengo mi horario, manejo mi tiempo) los sujetos están prisioneros y controlados que nunca. (38)
• Las metas del proyecto tecno-científico actual no consiste en mejorar las miserables condiciones de vida de la mayoría de los hombres, sino en responder al impulso insaciable que ignora todas las barreras tanto para dominar el mundo exterior como el mundo interior. Sobre todo ejercer un control total sobre la vida, tanto humana como no humana y superar todas las barreras y limitaciones biológicas (hasta la mortalidad). No sólo se trata de mejorar y embellecer el cuerpo a cualquier precio, sino de matar la muerte, de asegurar la inmortalidad. (53)
• No es extraño que la autora hable en algunos de sus capítulos de: “La evolución postbiológica” (133), “Bioprogramaciòn: formateo acelerado de cuerpos y de almas”. (158) “La alquimia de los genes y de los bits: una eugenesia al gusto del consumidor” (184). “La enfermedad como error en el código” (229) O que para explicar, por ejemplo, la instalaciones de “desfibriladores” – restablece el ritmo cardíaco normal mediante la aplicación de una descarga eléctrica – en los lugares públicos, médicos y funcionarios hablen de un “formateo” del corazón, que reinicia su marcha como si fuera una computadora tildada.

El cuerpo, es el lugar de una multitud intervenciones tecnológicas en donde lo natural (orgánico), deja su lugar a lo post orgánico.

• Cuerpos operados: por razones de salud (extirpar, arreglar, suturar), eugenesia (cesáreas) y operaciones relacionadas con alteración de la reproducción.

• Cuerpos alterados mediante operaciones: diversos tipos de cirugías estéticas, con el uso de verbos muy curiosos: poner, sacar, estirar, sustituir, mejorar, acondicionar, achicar, agrandar, etc. No intervienen sólo los cirujanos plásticos, sino un ejército invasor: odontólogos, oftalmólogos, dermatólogos y otros, con el séquito de sus auxiliares técnicos y equipamiento tecnológico.

• Cuerpos modelados a través de diversos tipos de gimnasias, con la presencia de los especialistas y los medios tecnológicos.

• Cuerpos arreglados y formateados mediante diversos aportes cosméticos (industria) y sus especialistas: estilistas, cosmiatras, cosmetólogos (eventualmente la presencia de dermatólogos). Los peluqueros estilistas ocupan un curioso lugar de privilegio en este escenario ya que combinan varias de las funciones enunciadas (asociadas al vínculo que suelen establecer con los usuarios).

• Cuerpos disciplinados mediante diversos tipos de dietas y gimnasias. Diversos tipos de ortopedias (en diversos lugares del cuerpo).

• Cuerpos violentados a través de privaciones o agresiones: bulimia /anorexia.

• Cuerpos tentados permanentemente por el disfrute de todos los placeres

• Cuerpos divididos por la estrategia de la erótica que juega con la exhibición y la mirada, la histeria y el deseo, la promesa y la negativa, la invitación y la postergación.

• Cuerpos asociados a un interior invadido con químicos regulados o experimentales: antidepresivos, energizantes (psico-somáticos), de rendimiento sexual o de ampliación de la posibilidad de gozo, mecanismos regulatorios del estado de ánimo y de la autoestima, chalecos químicos para amortiguar las conductas.

Los interrogantes que sobrevuelan, al concluir la lectura, invaden el territorio de la educación: ¿de qué debe ocuparse la educación de nuestros días? ¿Cuáles son sus retos y sus desafíos? ¿Cómo puede acompañar este casi descontrolado desarrollo tecnológico que privilegia la vida de algunos y que condena a la desprotección al resto? ¿Cómo incorporar todas estas problemáticas en el desarrollo curricular, sin descuidar las funciones específicas? ¿Cómo hacerse cargo del cuerpo que tenemos (orgánico) y ese desarrollo post orgánico que nos aguarda?

1 comentario:

alex dijo...

Los empleados a menudo tienen acceso a información personal confidencial que puede ser mal utilizada o vendida a un tercero. importante para eso tener un Control teletrabajo programas que te ayudaran a solucionar todos los problemas